COMPRENDAMOS

El término currículum se ha usado para designar el curso de los estudios emprendidos por un alumno en una institución dada. En algunos países ha llegado a ser equivalente a los contenidos de las materias que se han de cursar a lo largo de un ciclo educativo.

Así tenemos que currículum, desde el punto de vista tradicional, puede designar:

• La descripción de las materias a desarrollar en un cierto nivel escolar o en un seminario o cursillo.
• El programa detallado de una disciplina para todo un ciclo de estudio.
• La organización y relación de las materias para el conjunto de un ciclo.

En la actualidad podemos hablar de dos posiciones complementarias: una pretende centrar el currículum en materias indispensables, bien definidas organizadas y jerarquizadas y la otra propone hacer de la experiencia del estudiante, de sus necesidades y motivaciones, la concepción de currículum.

De esta manera lo que en un principio era una simple lista de nociones para adquirirse conforme a la estructura lógica propia de cada disciplina, se convierte en todo aquello que concurre a la realización de estudios y que tiene influencia y acción decisiva sobre éstos. Así como “currículum vitae” significa al correr de la vida y por extensión todo lo relevante que se ha hecho sobre el devenir de una existencia, tenemos que “currículum studii” es todo aquello que incide en el devenir de los estudios. De ahí que conforme a la última acepción, los planes de estudio se consideren como parte primordial del currículum, pero no exclusivamente, ya que existen otros factores que convergen en los estudios, surgidos de la comunidad escolar o provenientes de la comunidad más grande que rodea al estudiante cuando realiza su quehacer cotidiano. Aquí convergeríamos con Caswell cuando nos dice que currículum es todo lo que acontece en la vida de un estudiante, en la vida de su país y de sus profesores. Todo lo que rodea al alumno en todas las horas del día constituyen materia para el currículum, en otras palabras, currículum ha sido definido como el “ambiente en acción”.

La línea sobre la que se trabaja , en atención a los curricula, pretende que éstos sean:

• Más adecuados a las necesidades de la colectividad nacional y a las exigencias de la comunidad internacional.
• Más coherentes y mejor articulados entre sí, ocupándose particularmente de las relaciones entre contenidos escolares y extraescolares y de la transición de un nivel a otro.
• Más equilibrados internamente atendiendo al tiempo específico y efectivo que cada estudiante dedica diariamente a su educación.
• Más interdisciplinarios, de manera que se tome en cuenta la evolución del conocimiento y la integración de éste en la vida nacional.
• Más flexibles y adaptables al cambio.

Resulta así que paralelamente a la actualización del curriculum tradicional, se ha ido desarrollando la noción abierta del currículum (currículum studii). Este tipo de currículum más flexible favorece una mayor amplitud de realización y al mismo tiempo un mayor desarrollo de las diferencias y de los intereses individuales atendiendo a toda la gama de opciones que pueda brindarle al estudiante, la vida moderna dentro de una comunidad determinada.